martes, 26 de enero de 2016

10 CONSEJOS PARA REFORZAR TU MARCA PERSONAL SIENDO UN ALUMNO DE MÁSTER



A menudo me preguntan los alumnos qué pueden hacer para mejorar su perfiles en los procesos de selección. En mi opinión, hay mucho que se puede hacer antes de un proceso y que sirve de preparación para el mismo. Se trata de reforzar tu marca personal y hacer una serie de pequeñas rutinas que te ayudarán a tener una mejor imagen y conocer mejor el sector legal antes de enfrentarte a los procesos de selección:

1.      Habla con tus profesores: existe un miedo generalizado o una sensación de “peloteo” por el cual parece que está prohibido o mal visto en hablar con tus profesores, pero resulta que es todo lo contrario. Lo más importante que tiene un profesor es su vocación por la enseñanza y servir a sus alumnos, la gran mayoría suelen estar encantados de atenderte y no sólo para cuestiones de nivel técnico, sino también de carácter profesional.

2.      Tener un buen Currículum: el CV es la hoja más importante de tu vida. Hay que cuidarla y explicarlo todo de la mejor manera. Tiene que estar perfecto. Pide ayuda a terceros para que te lo revisen y te den su opinión.

3.      LinkedIn: en la era de las redes sociales tener LinkedIn es imprescindible. Pero además, no de cualquier manera. Es muy importante cuidar el perfil que mostramos al público. Además, es una buena herramienta profesional para estar en contacto con compañeros de clase, profesores y otros profesionales del sector legal. Por otro lado, ten cuidado con lo que publicas en tu Facebook, los reclutadores lo miran todo.

4.      Twitter: vincular tu cuenta de twitter a tu marca personal es otra fantástica idea y empezar a seguir a profesionales del sector que publican artículos, narran los eventos a los que asistan y te informan sobre las últimas novedades. Eso sí, si la cuenta es profesional, nada de twitear con amigos sobre el Madrid-Barça.

5.      Busca un mentor: quizás tu Universidad tiene un departamento de carreras profesionales, si no lo tiene, busca a alguien que te conozca y pueda aconsejar en aquellas cosas en las que puedas mejorar tu perfil y te oriente en tu carrera profesional.

6.      Asiste a conferencias y eventos del sector: conoce gente nueva, haz networking, no tengas miedo a ir a eventos a los que te inviten y hablar con otros colegas. Nunca sabes las oportunidades que pueden surgir si sabes dar con la tecla adecuada.

7.      Ten una tarjeta de visitas: cuántas veces un abogado o profesional del sector te da una tarjeta y te quedas con la sensación de tener que devolver algo y tienes las manos vacías. Entregar una tarjeta profesional, sencilla (no ostentosa), que remarque que eres estudiante, el programa que cursas y tus datos de contacto causa una gran impresión.

8.      Cuida tu dress code: nunca sabes cuándo va a llegar el momento ni la hora en la que puedas conocer a alguien que te abra las puertas a una oportunidad profesional. Por ello es bueno estar siempre preparado y tener un aspecto profesional y cuidado que confiera una imagen de trabajo y confianza. La imagen es importante.

9.      Prepara las clases: no hay mejor escenario para destacar que en tu propia clase. Si tienes la suerte de que tus profesores son profesionales del sector en muchas ocasiones te invitarán a participar en el proceso de selección del despacho si tienes un papel protagonista en clase, para ello la preparación es crucial y así impresionar al profesor.

10.  Ser buen compañero: ayudar a tus compañeros de clase con un caso, los apuntes de clase, etc además de un favor te creará buena fama entre tus iguales y hablarán siempre bien de ti. Generarás una gran confianza y siempre dirán que eres una persona con la que se puede contar. Crearás buen ambiente a tu alrededor.

martes, 19 de enero de 2016

10 CONSEJOS QUE NUNCA TE DIERON PARA TENER UN BUEN CV



Todos sabemos hacer un CV, no puede ser tan difícil ¿no?, y sin embargo, a lo largo de mi carrera profesional puedo contar con los dedos de una mano los CVs que he leído que estuvieran perfectos. Sí, perfectos, no digo como a mi me gustasen, sino que estuviesen cuidados, limpios, claros, con una orientación a causar una buena impresión, que es el objetivo con el que se habían elaborado.

Quizás con frecuencia hayas oído algunos consejos típicos como, son importantes las faltas de ortografía, poner bien tu email y teléfono u ordenar la información correctamente. Todo esto es crucial, pero son tips que se quedan en la superficie. Si quieres tener un CV, que sorprenda, lee estos consejos antes de comenzar a enviarlo:

1.     Cuidar el formato: la imagen en el CV es básica. Lo primero que se observa en un CV no es su contenido, sino cómo está distribuido. El CV de un alumno de Máster o graduado en Derecho debe ocupar un solo folio. Debe contener toda la información sobre el perfil, y es importante que se entienda rápidamente su estructura. Un formato típico es distribuir los hitos que se van marcando en tres columnas, de izquierda a derecho; una para la fecha, otra para lo que hiciste, y la última, para el lugar donde lo hiciste. Hay que cuidar también el uso siempre del mismo tipo de letra, tamaño, cursivas, etc en todo el CV.

2.      Los signos de puntuación: se habla mucho de las faltas de ortografía y poco de los signos de puntuación. Para un abogado, lo más importante en su trabajo es la calidad de lo que entrega. Es muy importante cuidar por tanto dentro del formato los signos de puntuación. Si decides usar puntos o no al final de una frase es cosa tuya, pero elige y haz siempre lo mismo. Este error es muy común y pone de los nervios a los reclutadores.

3.      Foto con apariencia profesional: no es cuestión de enumerar la de veces que he visto fotos en el CV en las que aparecían dos caras distintas, una persona saliendo de fiesta, con camiseta negra o la foto de la orla. Si estamos postulándonos para una posición en un despacho de abogados, es importante transmitir una imagen seria y profesional (que es lo que se requiere en este tipo de empresas). Por tanto, foto con fondo blanco detrás, los varones con traje y corbata discretos, las mujeres, con blusa o camisa y americana.

4.     Los idiomas, lo más importante: es la parte más difícil de realizar con propiedad en un CV y nunca le damos toda la importancia que realmente tienen. Hoy día, los reclutadores descartan más a los candidatos por su nivel de inglés que por la media de expediente. Un candidato con una media de expediente normal (superior a 6 e inferior a 8), puede aspirar a entrar en un gran despacho, pues puede demostrar estar en posesión de otras habilidades sociales que lo hagan atractivo para el mercado, pero lo que no cabe duda, es que debe tener siempre, siempre, siempre un buen nivel de inglés. Por tanto, no basta con indicar sólo nivel AVANZADO. Es importante incluir los títulos, cursos y experiencias que hayamos podido realizar en el extranjero y que avalen el nivel que decimos poseer.

5.     El nombre es el título: no es frecuente, pero en ocasiones leo un titular que reza CURRÍCULUM VITAE y después el nombre del alumno. Hoy en día, nada más coger entre tus manos un CV, si está bien hecho, sabes que estás ante un CV, por lo que no merece la pena emplear espacio en tu único folio, para escribir ese título. Al contrario, es más comercial y visible escribir tu nombre en mayúscula y con un tamaño de letra mayor para que sea más fácil recordar tu nombre.

6.      Formación complementaria abajo: a menudo, encuentro en muchos CVs un apartado entre la formación académica y la experiencia profesional denominado formación complementaria. Generalmente se suele referir a cursos, congresos y otras sesiones de formación variadas, que no aportan especialización pero sí indican interés por haber realizado otras actividades que refuerzan nuestra formación. Sin embargo, a lo largo de un CV debe existir un sentido siempre en el que lo más importante debe colocarse en la parte superior del folio y lo menos importante en la inferior. De manera, que tiene sentido incluir este apartado en la parte inferior que pueda referirse a otros datos de interés, realzando en su importancia a otros como la experiencia profesional o los idiomas.

7.      El orden cronológico inverso: también es importante ordenar la información de más reciente a menos reciente. Normalmente esto será lo mismo que decir de más a menos importante, ya que generalmente lo más reciente suele ser de mayor valor profesional y, por otro lado, la persona que lea el CV podrá hacerse una idea clara de cuáles han sido las fases evolutivas en la formación y experiencia del candidato.

8.      Experiencia profesional no jurídica: muchas veces me encuentro con candidatos que han hecho prácticas en un despacho de abogados y además estuvieron trabajando como camareros, canguro, etc “¿eso se pone?” me preguntan con frecuencia. Por supuesto que sí, pero cada cosa en su sitio. Si tienes unas prácticas en despacho y tu interés en dedicarte a la abogacía, en tu apartado de experiencia profesional escribe sólo sobre esta experiencia y trata de describir en detalle lo que hiciste. Más abajo, en otros datos de interés, puedes hablar de otras experiencias profesionales no jurídicas donde puedas citar el resto de trabajos que has realizado. Si no has realizado prácticas en despacho puedes entonces usar este apartado para hablar de los trabajos que has desempeñado.

9.      Usa la negrita en lo importante: un CV es marketing, es venderte. Venderte para conseguir una entrevista o pasar la criba que te de acceso al proceso de selección. No olvides destacar tres, cuatro o cinco palabras en el CV que consideres te hacen diferente al resto y tengan relación con el puesto al que te estás postulando.


10.  Menos es más, sino vende no sirve: todo lo que incluyas es tu CV debe estar pensado para causar una impresión positiva en el lector. Si no lo va a conseguir, sobra. Es importante ser conciso en las descripciones y hacerlo de manera neutra (ej: asistencia a juicios, búsqueda de jurisprudencia, redacción de contratos de compraventa, etc). Las descripciones deben mantener el difícil equilibrio de ser lo suficientemente descriptivas para poner en contexto al lector y diferenciarse del resto, y sucintas para no decir más de la cuenta.